A pesar del transcurrir inexorable de los años sigue jugando con sus creaciones como si fuera a vivir eternamente. No es consciente de que a su alrededor el palacio se desmorona y que la música de los últimos banquetes se balancea ingrávida sobre los estanques deshidratados, donde una inconsolable negligencia permite que los recuerdos depreden el instante. Los dedos del pianista están listos para interpretar la sonata húmeda y melancólica con la que se despide de todo. Siente que la vida fluye por sus venas, ¿por qué preocuparse de la muerte? Ha comenzado una novela, dos cuentos y una ópera bufa. Está planificando su cuarto viaje a La India y no sabe dónde vivirá a fin de mes, si en la fría y descarnada costa o en el interior del valle, suave y predecible. Su vida ha transcurrido entre estos dos escenarios, las rocas sacudidas por la mirada vacía de las gaviotas y la paz de las montañas, mecidas por el paso de las lunas, la sangre y el óxido del olvido.
IK0 ejecuta el mismo movimiento con el arco que los últimos cien amaneceres, el chelo gime y las primeras vibraciones inundan el desconchado palacio. La actividad en los jardines cesa y en las cocinas los cisnes bailan su último vals entre mermeladas y trufas de Armiñón.
Nada puede arrancarlo de su abstracción favorita, está viendo salir el sol mientras las yemas de sus dedos acarician las cuerdas de la banda sonora de su vida, la leyenda de lo que pudo ser y no fue, de lo que fue y no debería haber sido… Como buen judío lo refuta todo, lo cuestiona todo, nada es seguro. Dios le obliga a dudar de todo, para eso creó la Cábala, para destruirse y crearse eternamente.
YU5 le llama para desayunar
– Nuestro estado de ánimo depende de lo que el cuerpo le comenta al cerebro a cada instante, si consigo cortar esa comunicación podré vivir todo el tiempo que me quede como si fuera a vivir eternamente, ¿no te parece querida? – IK0
– ¡Buenos días a ti también! Ya veo que sigues con la obsesión de engañar a tu mente con los años de tu cuerpo ¿No crees que ella también cumple años? y, por lo tanto, de la misma manera que tu cuerpo está cada vez más limitado para disfrutar del hedonismo, a la mente creada por tu cerebro le pasará lo mismo – le comenta YU5 mientras rompe la cáscara de un huevo pasado por agua.
– En absoluto, nuestro cerebro está preparado para vivir más de doscientos años, son las vísceras del cuerpo las que tienen los días contados. Los sentimientos y las emociones que los mapas de todas la vísceras transmiten a los mapas neurales del cerebro, encargados de analizar el estado en el que se encuentra el organismo en su conjunto, son los responsables de que nos sintamos exhaustos o desbordantes de energía, felices o melancólicos; todo está ahí, si consigo alterar esa comunicación y transmitir sólo datos de equilibrio y bienestar desde el cuerpo al cerebro, pase lo que pase en mi organismo seré feliz y dispondré de energía ilimitada hasta el último suspiro – IK0
– Aún eres joven para hacer lo que desees, ¿por qué esa obsesión de la eterna juventud?, te tenía por un enamorado del conocimiento y no por un frívolo Peter Pan – YU5
– No estoy atrapado en un deseo superficial de disfrutar eternamente de los placeres de la carne, que por otro lado no me molestaría en absoluto, de lo que hablo es de piratear el sistema de comunicación con el que los cromosomas, la neurobiología, la psicología evolutiva, la física de las partículas elementales o el mismísimo Dios, han entrelazado mi edad física con mi edad mental; justo es esto lo que quiero desconectar. No deseo que mi mente gestione los sentimientos de un organismo que lucha constantemente por no ser contagiado, agredido, violado… – IK0 trocea una fresa y medio plátano sobre un cuenco con yogurt de oveja.
El vuelo que le llevará de nuevo a La India está a punto de despegar. 16 horas le separan del cielo de Bombay, la densidad de sus calles atestadas de gente, de colores, de olores y de una inagotable avalancha de datos para los sentidos. Bombay sique siendo demasiado grande para que a un recién llegado le pase algo que no sea caminar y alucinar. Tras dos días en una de las ciudades más cinematográficas y locas del planeta, vuelan hacia la mística Madrás. Se instalan y alquilan un coche para visitar Kanchipuram, una de las siete ciudades sagradas para el hinduismo. No ha dejado de llover durante varias semanas, todo está inundado, caminan con el agua por las rodillas. En los estanques de los templos las flores y los monos compiten por el protagonismo de un mundo donde los dioses fermentan entre opio, sangre, sudor e incienso. Vuelven a Madrás, aeropuerto y vuelo a Calcuta. Comienza la gran aventura, la ciudad de los sacrificios a Kali, la diosa que erige reinos desde el caos al tiempo que convierte otros en cenizas. La huella profunda de María Teresa de Calcuta y su culto al sufrimiento transmutado en satisfacción. Agua y fuego, la esposa de Shiva no da tregua, la ciudad que devora y es devorada.
YU5 coge un vuelo a Varanasi. IK0 el tren, 624 km en catorce horas; uno de los trayectos con más seres humanos por metro cuadrado, más espiritual y mugriento del lejano oriente. Clase turista en el expreso operado por Indian Railways, Calcuta–Benarés
IK0 alquila una litera en el mesiánico convoy. YU5 le espera en Varanasi, meditando y navegando al amanecer sobre las oscuras y radiantes aguas del Ganges; recorriendo sus laberínticas calles con olor a canela y carne quemada. Le espera en la ciudad más sagrada de la India, mientras IK0 experimenta de nuevo el viaje que a los 22 años le cambió la vida. El tren arranca, se toma dos ansiolíticos y un trago de agua con pasiflora; nota como las pupilas se le contraen, no tanto como con la heroína hace treinta años, pero lo suficiente como para sumergirse con los sentidos acolchados en el trayecto que conduce a la ciudad más antigua del mundo, a la ciudad de la muerte; el lugar donde los hindúes van a morir para romper la cadena de la reencarnación y tener la oportunidad de ir directamente al Nirvana.
Han transcurrido ocho horas de recorrido, siente que su cuerpo y su cerebro quieren comunicar con una mente que ya no los escucha; se ha desconectado, igual que el alma de los moribundos que inundan el tren, aguantando la muerte hasta estar junto al Ganges, no sea que una cura milagrosa demuestre que no son dignos de entrar al Nirvana y su vida se convierta en un infierno al ser rechazados por todos.
Para que no le ocupen la litera al marchar al servicio, IK0 ha ido orinando todo el trayecto en una botella de agua de dos litros a la que ya no le queda espacio para otra micción. Debajo de él, una familia que se dirige a Varanasi para acompañar al abuelo a morir junto al Ganges, ríe con los dientes de oro brillando entre basura, trozos de fruta y tazas de té.
De pronto, el racimo humano que durante más de diez horas ha fermentado en su propio caldo de pobreza, fervor religioso y entropía visceral, se pliega sobre sí mismo y miles de almas hacinadas sobre las vías del ferrocarril guardan sepulcral silencio; con las manos unidas sobre la frente, saludan a la serpiente de agua que llevará sus almas hasta el Nirvana y así todo cobrará sentido; el dolor y el sufrimiento quedarán fundidos en el fuego solemne de Surya, el dios del Sol.
IK0 se prepara para salir del tren, la escena le indica que están llegando. Se asoma a la ventana, están pasando un puente que los eleva sobre el fluir sagrado, sobre la masa de agua más adorada del planeta, están atravesando el Ganges; pasados unos minutos de silencio lisérgico todo vuelve a la normalidad.
– ¿Son la mente y el cuerpo dos cosas diferentes, o sólo una? Si no son lo mismo, ¿están la mente y el cuerpo formados por dos sustancias diferentes, o por sólo una? Si son dos sustancias, ¿es la sustancia de la mente la que viene primero y hace que existan el cuerpo y el cerebro, o bien la sustancia del cuerpo es la primera y su cerebro causa la mente? Y, ¿cómo interactúan estas sustancias? – medita IK0 mientras, hipnotizado, contempla como se despierta esa marea humana que comienza a inundar los andenes de la estación. Se baja de la litera, las piernas no le responden; entre el enjambre de seres humanos que allí se atrinchera esperando la llegada del tren, distingue de manera milagrosa la cara sonriente de YU5, está a salvo.
Pasean por las milenarias calles de Benarés; por cada uno del centenar de ghats que dan acceso al cauce del río, en esa especie de gran palco sobre el Ganges que es Varanasi. IK0 siente que ha muerto de nuevo, ya está listo, pueden partir.
Alquilan un coche con chófer, se dirigen a Agra; IK0 quiere volver a escuchar la llamada a la oración mientras camina por los jardines del Taj Mahal; desea volver a sentir esa energía suave que parece haber estado siempre ahí, desde el origen de los tiempos, y que de pronto sientes que también circula por tu cuerpo, sube por la columna vertebral y se inyecta en el cerebro, empapando a su paso cada músculo, cada célula, de paz y certeza.
A través de la ventana observan las calles espesas de las aldeas que atraviesan. YU5 coge la mano de IK0, sabe que su mente está hirviendo por esa última obsesión de controlar la información que su cuerpo le envía al cerebro y este a su mente. Quiere controlar ese proceso y poder sentir a la carta; decidir en cada momento cómo sentir cada emoción y así decidir como experimentar lo que está viviendo.
– ¿En qué piensas? – YU5
– El ver a esos niños, perfectamente sanos, aun viviendo en unas condiciones higiénicas y nutricionales casi incompatibles con la vida, me ha hecho pensar que para que el cerebro coordine la lista interminable de funciones corporales de las que depende la vida, necesita tener mapas en los que se represente, momento a momento, el estado de los diversos sistemas corporales. Le resulta fundamental saber que está ocurriendo en los diferentes sectores del cuerpo, para que su mano derecha, la mente, pueda obrar en consecuencia– IK0 deja de hablar, suelta la mano de YU5 y pide al chófer que pare.
– Señor, esta zona es peligrosa, hay mucha delincuencia y un coche parado en la cuneta, con un matrimonio de turistas a bordo, es una llamada muy poderosa y no precisamente a la oración – RO3
– No te preocupes, es sólo un momento – IK0 hace gestos desde el exterior pidiendo a YU5 que le acompañe; ella abandona a regañadientes la seguridad y tranquilidad del vehículo para ir junto a IK0 que se adentra sin rumbo fijo por las calles humeantes del extrarradio de Kanpur. IK0 coge la mano de YU5 y le susurra emocionado, – Cuando el cuerpo o el cerebro hacen algo que la mente no tiene previsto, es cuando entendemos porque los sentimientos son acontecimientos mentales, nos ayudan a resolver problemas no rutinarios que implican creatividad, como haber abandonado la comodidad de ir observando el corazón de La India desde la venta de un coche, en lugar de sumergirnos en ella como estamos haciendo ahora; abriendo la puerta a que cualquier eventualidad exija a nuestro organismo atacar, huir o dialogar con un desconocido para salvar la vida.
El chófer les sigue nervioso, conoce este barrio de Kanpur Nagar, una zona industrial muy complicada, un poco más adelante comienza la zona rural de Rambai Nagar, que sería mucho más amable con ese par de turistas maduros que en cualquier momento le pueden meter en un buen lío. Estas ciudades de las costas del Ganges son un imán para gente de todo el país que vienen con el sueño de enriquecerse a costa del flujo constante de millones de hindúes que vienen a purificarse para tener una buena vida, o a morir para no reencarnar y quedarse por siempre en el acogedor y previsible, Nirvana.
– Los sentimientos son necesarios porque son la expresión a nivel mental de las emociones y de lo que se esconde en ellas – IK0 continua su monólogo mientras coge del brazo a YU5 y le habla susurrándole al oído – Sólo en este nivel mental se hace posible la integración del pasado, presente y futuro anticipado; sólo a este nivel es posible que las emociones creen, a través de los sentimientos, la preocupación por el yo individual; es decir, que tengamos conciencia de nosotros mismos y de la necesidad inherente de cuidarnos para sobrevivir y alcanzar determinadas cotas de bienestar. ¿Estás preocupada? – concluye IK0 riendo y abrazando a YU5, que al tiempo guiña un ojo a RO3 indicándole que ya pueden volver al coche.
Continúan camino hacia Agra – ¿Si no fueras neurólogo qué te habría gustado ser? – le pregunta YU5, – No sé, quizá hubiera estudiado Filosofía; realmente puse primero Filosofía y después Medicina, pero al ver que podía entrar en la segunda me decidí por la profesión que lleva generaciones en la familia; ya sabes, mi abuelo psiquiatra y mi padre traumatólogo. No sé, no me arrepiento; la carrera me decepcionó, pero cuando comencé con la especialidad en neurología todo cambió, me fascinó desde el primer momento, sobre todo saber cómo y dónde se genera la conciencia – IK0.
Está anocheciendo, no podrán llegar a Agra hasta el día siguiente, deciden hacer noche en un hotel de carretera que conoce RO3. El hotel está junto al Ganges que han cruzado en silencio justo antes de llegar al Katri Hanshimpur Guest House. La Luna, brillante y anaranjada, tiñe de recuerdos la mente de IK0. Mira a YU5 y un baile de máscaras le catapultan al pasado; pero a él, sólo le interesa el presente y predecir el futuro; lucha por salir del pozo de los recuerdos; lo consigue saboreando una cerveza fresca junto a RO3 y su mujer, en la terraza del último piso del hotel. El río brilla como una serpiente de jaspe líquido que les obliga a clavar la mirada en su belleza.
– ¿Quién manda?, ¿la cabeza en el cuerpo o el cuerpo en la cabeza? – pregunta RO3 rompiendo el embrujo del momento.
– Supongo que por cabeza quieres decir mente. Esta existe porque hay un cuerpo que le suministra contenidos. La mente realiza tareas prácticas y útiles para el cuerpo, controlando la ejecución de respuestas automáticas en relación con el objetivo correcto; anticipando y planificando respuestas nuevas; creando todo tipo de circunstancias y objetos que sean beneficiosos para la supervivencia del cuerpo – le contesta IK0 con los ojos clavados en el fluir incesante de las aguas.
– Así que la mente es la guía del cuerpo, algo así como yo para vosotros – la conclusión de RO3 provoca que todos rían distendidos.
– Las imágenes que fluyen en la mente son reflejos de la interacción entre el organismo y el ambiente, que afecta al cerebro y este al cuerpo; reflejos que el cerebro obtiene de cruzar la información que le llega del interior del cuerpo y del exterior; de donde obtiene el equilibrio que nos permite vivir a cada instante; teniendo tanta importancia el estado del páncreas como el de saber distinguir donde termina el suelo firme y comienza el precipicio – IK0
– ¡increíble! Entonces la mente es la responsable de que nuestros cuerpos funcionen como se espera que lo hagan; es decir, mi cuerpo para sobrevivir debe serviros a vosotros, al tiempo que mi mente se encarga de coordinar todo lo que siento y todo lo que hago para que así sea – RO3.
YU5 se siente incómoda por la inteligencia que demuestra el guía; sabe que IK0 no va a parar, al contrario, exprimirá al máximo la oportunidad que le brinda RO3 de convertirlo en su objeto de investigación.
– Así es, la mente existe para el cuerpo; está dedicada a contar la historia de los múltiples acontecimientos que en él acontecen, y utiliza dicha historia para optimizar la vida del organismo; es decir, como tú muy bien dices, la mente generada por el cerebro es un sirviente de todo el cuerpo. – IK0
– ¿Y cómo sabe el cerebro, la mente, quién es quién?; o sea, ¿a quién hay que servir para sobrevivir y quien tiene que dar las órdenes para que nuestros cuerpos no sólo conserven la vida, sino que además puedan disfrutar de ella – RO3
– No dejas de sorprenderme mi querido amigo, es la suerte de tener un chofer licenciado en biología; me preguntas qué es lo que el sentido del yo aporta al proceso; la respuesta es, una orientación. El sentido del yo introduce la noción de que todas las actividades actuales, aquí y ahora, representadas en el cerebro y la mente pertenecen a un único organismo cuyas necesidades de autopreservación son la causa básica de la mayoría de los acontecimientos que pasan en su realidad, tanto dentro como fuera del cuerpo. Y lo más alucinante es que todo esto sólo es posible, porque los sentimientos forman parte de los procesos que constituyen nuestro sentido del yo, y además porque los sentimientos están continuamente generando, dentro de la mente, una preocupación por el organismo y sus necesidades; es decir, prevalecer y, por supuesto, disfrutar de la vida, aunque a veces la búsqueda del placer pueda ponerla en peligro – IK0
Continúan viaje hacia la antigua capital del Imperio mogol; Agra, la ciudad del Taj Mahal, una de las tumbas más bellas del planeta, construida en el siglo XVII por Sha Jahan, 5º emperador mogol de la India. La ciudad milenaria acuchillada por el turismo de masas resiste solemne bañada por las aguas del Yamuna, principal afluente del sagrado Ganges.
Ruedan en silencio. YU5 le da vueltas a la agenda de actividades que durante cuatro días disfrutarán en la ciudad. RO3 piensa en su mujer que ahora estará entrando a trabajar a tan solo 240 km; en Delhi, enjambre humano de 32 millones de almas donde finalizará el cuarto viaje a la India de IK0. Hace treinta años habría aborrecido a ese viajero en 4X4 con chófer. Ávido de aventuras buscaba la inmersión total en el continente India; autobuses renqueantes que recorrían un trayecto de cien kilómetros en seis o siete horas parando en cada aldea; compartir ruta y habitación con los viajeros que se iba cruzando por el camino… Ahora todo es diferente, no necesita la experiencia física, sólo la mental; ¿cómo liberarse del cuerpo sin morir? No consigue dar con la solución. Lleva toda la vida investigando obsesivamente el cerebro y concretamente la ínsula, cuyo componente fundamental es la corteza somatosensorial, encargada de que tengamos tacto, de transmitirnos la posición de nuestro cuerpo en el entorno y de que sintamos dolor. Este canario y, al mismo tiempo, enemigo supremo de la paz mental, ha sido junto con el miedo una de las principales obsesiones de IK0; habiendo dedicado miles de horas a investigar cómo eliminar a esta pareja macabra, sin experimentar los indeseados efectos secundarios derivados de su erradicación. Un eterno retorno asfixiante del que no es posible huir.
Caminando por los jardines del Taj Mahal advierte que no tiene sombra; mira la posición del sol respecto a su cuerpo, observa a su mujer, ella tiene sombra, todo el mundo tiene sombra menos él. Se lo comenta a YU5 que obviamente sí ve la sombra de IK0 y alucina comprobando que él, no.
IK0 ha perdido su sombra, se ha liberado; ya no tiene nada que reprimir de sí mismo para ser aceptado por los demás. Mira de nuevo hacia el Sol y contempla extasiado la sombra alargada que el Taj Mahal proyecta sobre la corriente esmeralda del Yamuna; gira sobre sí mismo y recuerda las palabras del viejo Jung que ahora le asisten en esta cálida mañana de primavera, “Uno no se ilumina imaginando figuras de luz, sino haciendo consciente la oscuridad”. Coge de la mano a YU5 y se disuelven entre las flores aterciopeladas de la milenaria y exquisita tumba.
- Portada del excelente ilustrador Patricio Casal @patolobo1